Un mes más, enciendo mi escaner y te muestro las páginas de mis cuadernos de art journaling, las páginas que más me gustaron. Puedes ver todas las entradas de la serie en éste enlace.
Hoy comienzo a mostrarte el contenido de un nuevo cuaderno, uno que me ha llevado mucho tiempo terminar (me quedan 4 hojas, a día de hoy, por lo que esta semana lo doy por terminado). Es un cuaderno que me regalaron en las Navidades de 2015-16, y empecé a comienzos del año 2016. Pero fui bastante poco constante, ya que era algo nuevo en mi vida. Escribía dos o tres días, y a lo mejor me olvidaba durante semanas.
En 2017 lo retomé de nuevo con ganas, pero decidí ponerme con otro cuaderno mientras tanto (no sé, ideas que le vienen a mi cabeza sin motivo), así que volví a guardarlo en la estantería. Tras acabar dos o tres cuadernos más, retomé este en febrero de 2018, y hasta hoy, he seguido escribiendo en él. Si es cierto que no todos los días, pero cuando me siento delante de él, lo hago con ganas.
Es un cuaderno además que me encanta. Está hecho de papel reciclado, y la cubierta está hecha en ¿cuero?, decorada con motivos hindues. Puedes ver uno muy parecido aquí.
Las primeras páginas eran bastante aburridas. Mucho texto, en plan diario. De vez en cuando pegaba algo curioso, como una etiqueta de una bebida, o algún resto de washi tape o papel decorado que tenía a mano.
Por aquel entonces comencé a leer, por primera vez, El camino del Artista. Digo primera vez porque lo abandoné a la tercera semana... pero luego lo volví a intentar.
Poco a poco comencé a probar un estilo que ya has visto en más ocasiones, el ir incorporando recortes de revistas que me gustaban, o me llamaban la atención....
Y de ahí, ya con más soltura y más práctica, comencé a soltarme algo más, probando, mezclando y jugando.
A veces no escribía pensamientos ni lo que me había ocurrido. Simplemente había leído en algún lado algo que me llamaba la atención, y lo copiaba, como frases motivacionales, o este ejemplo de página, en la que copié las posturas de yoga ...
Al final es lo que hace especial al cuaderno, que cada página, cada día, era diferente. Algunos más aburridos. Otros más emocionales. Otros más coloridos... y el conjunto hace que repasar las páginas sea una delicia.
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Chulísimas tus páginas!!!
ResponderEliminarGracias!
Eliminar¡Hola, Sara!
ResponderEliminarFantásticas las páginas de tu Art Journal.
¡Besotes y feliz domingo!
Gracias!
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