Lo primero, si es tu caso, no te sientas mal. Es muy habitual que ocurra esto, sobre todo cuando nos venimos arriba y nos proponemos objetivos que son muy bonitos, pero que dependen en exclusiva de nuestra motivación. Y a la primera de cambio en que las cosas se tuercen, o nuestra rutina cambia, esos objetivos se quedan en la cuneta. Yo, este año, y tras la incertidumbre que fue el año anterior, he dejado de plantearlo en modo objetivo (te cuento más aquí).
Hoy hablamos de cómo fijar objetivos bien definidos, y que te ayuden a que los puedas alcanzar. Esta entrada es algo larga, pero creo que puede resultarte útil, si quieres aprender a definir objetivos y a organizarte para ponerlos en marcha ¡y cumplirlos!